¡Bendita seas tú entre todas las mujeres!
- Canet
- 30 abr 2015
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Y quizá te susurre cuando ya no aparezcan más mis musas; Y tal vez me dedique a permanecer en otros lugares; Tengo tanto vigor como para abrirme ante ti, que ya me he convertido en poeta ante tus ojos y taciturno ante un recio compromiso. Deséame ventura, porque probablemente, hoy ya no hallemos la duda. Sigo echando de menos la latitud entre tus piernas y mi boca, y amanece tan prematuramente. Sigamos endulzando la vida con sales de mar deleitoso ¡Bendita seas tú entre todas las mujeres! Y tu imagen, y tu quimera... En mi realidad, residencia de arcaicos libros y sueños. Mereces no ser olvidada. Honesta e imprescindible está siendo esta evocación. Vuélvete tan loca como el abajo firmante y haz licuar los días con el más llameante de los fuegos. Conseguiré arrancarte el juicio seguiré tejiendo tus manos entre mi pecho; Doraré mi aliento con el hálito de tu boca; Inhalaré hasta la última de tus palabras y Seguiremos, en medio de está multitud, entendiendo que más vale seguir amándonos aunque tan sólo sea en sueños.

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